Los representantes de las entidades locales de Jerez que estaban convocados ayer al encuentro en Diputación con el vicepresidente de la entidad, Bernardo Villar, insistieron en su encuentro con él en que la institución provincial adelante el pago de las transferencias corrientes para combatir la situación de bancarrota de sus arcas. Una bancarrota ficticia, puesto que gozan, en la mayoría de los casos, de saneadas cuentas sobre el papel, pero carentes de liquidez.
Según han explicado tras su encuentro, el diputado les aseguró que Diputación no tenía problema en adelantar esos pagos, siempre y cuando el municipio lo solicitase. La cuestión está en que el ayuntamiento matriz, asegura alguno de estos alcaldes, no lo solicita a Diputación, a pesar de que en su encuentro con la alcaldesa de Jerez, María José García Pelayo, que se produjo hace aproximadamente un mes no se mostró en contra de esa solicitud.
En ese sentido, y haciéndose eco de la demanda de las peticiones de sus alcaldes pedáneos, el Grupo Socialista en la institución presentó en el último pleno una propuesta al respecto que fue votada en contra por la mayoría popular de la institución.
