Política

El alcalde de Torrecera niega las acusaciones de Adelante

El alcalde de Torrecera, el socialista Francis Arcila, ha negado tajantemente las acusaciones realizadas por Adelante en un comunicado de prensa respecto al empleo de “tácticas caciquiles y amenazadoras con los vecinos críticos” de su entidad local. Según ha explicado a Las Noticias, “es totalmente falso. No he amenazado a nadie ni he tenido ningún problema con ningún vecino; de otra manera, existirían denuncias; y no hay ninguna denuncia”. Según Arcila, “sí es cierto que he mantenido una conversación con una familia en concreto, estrictamente una, pero no ha supuesto ningún problema”.

Por el contrario, el nuevo alcalde desde el pasado mes de junio sí ha reconocido que “hay mucho nerviosismo en quienes han gobernado durante las últimas legislaturas en el pueblo, porque les cuesta aceptar que han perdido las elecciones; y también hay preocupación por parte de los vecinos y vecinas, por las liquidaciones del servicio del agua, que no terminan de salir adelante y eso es algo que inquieta”.

De hecho, hoy mismo, casi con un año de retraso, han salido las liquidaciones de los pasados meses de noviembre y diciembre de 2018; y hay dudas respecto a cuándo podrán salir las siguientes. Precisamente, respecto a la gestión del agua, Francis Arcila ha explicado que “se ha encargado un estudio para conocer realmente qué es lo que más conviene a nuestro pueblo; lo mejor será lo que más convenga”.

Adelante

Hay que recordar que Adelante acusaba en su nota al actual alcalde, Francisco Javier Arcila de visitar a los vecinos «casa por casa para pedirles explicaciones y amenazarlos, exigiéndoles no salir públicamente, ni en las redes sociales ni en ningún medio en lugar de responder qué plan tiene para el pueblo y para este servicio». También según Adelante, «el nuevo alcalde parece haber abierto la puerta de nuevo a que Aqualia se vuelva a instalar en Torrecera. Esta actitud da que pensar que la intención del nuevo alcalde sea buscar “acuerdos entre colegas” con Aqualia “poniendo en peligro la gestión pública del agua, visto que cuando se le pregunta no responde, elude respuestas claras y se limita a decir que está estudiando el tema”.

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