El alcalde de Guadalcacín, Salvador Ruiz, ha comparecido esta mañana en rueda de prensa con una representación de los hosteleros que iban a participar en la X Feria de la Tapa, que debía haberse celebrado el pasado fin de semana, con el objetivo de “evitar el runrún y las especulaciones”.
Ruiz, que mantenido una reunión previa a la rueda de prensa con los hosteleros, ha explicado que “por diferentes motivos se decidió por parte de la anterior corporación suspenderla, nosotros hemos entrado y hemos visto lo que había, hemos visto los plazos, la idoneidad de hacer la Feria de la Tapa” y finalmente tras sopesar los pros y los contras se ha decidido que ésta no tendrá lugar en este año 2023.
Entre las razones de esa suspensión estarían “la climatología, pues en verano prácticamente se perderían los mediodías y buena parte de la tarde y el hecho de que ahora mismo habría que partir de cero, pues ya no sabemos la disponibilidad de las empresas proveedoras de carpas, música o sonido, entre otras”.
Salvador Ruiz ha añadido que “una Feria de la Tapa lleva meses de preparación para que salga bien, no unas cuantas semanas” y ha asegurado que “más que a mí no le duele a nadie, yo soy el padre de la criatura, ahí nos embarcamos hace diez o doce años, los hosteleros nos siguieron, pero hay que hacer las cosas para que salgan bien”.
Según Ruiz, además, intentar encajar la Feria de la Tapa obligaría a modificar otras propuestas que ya se están trabajando como la Oktorberfest o la recuperación del Mercado Medieval que llegarán a Guadalcacín el próximo otoño.
