Desde su nacimiento hace 18 meses ha triplicado el número de socios
Hace alrededor de un año y medio, después de una larga experiencia de autoconsumo ecológico relacionado con la asociación de consumidores «El Zoco» nació la cooperativa «La Reverde». «Era el momento», asegura su presidenta, Marianna Zungri, de «dar el salto».
Con un grado amplio de aceptación y un grupo importante de consumidores ecológicos y convencidos de que el momento de crisis era «idóneo» para «fomentar que la gente se fuese concienciando de lo difícil que es hoy ser agricultor,y producir verdura o fruta y del esfuerzo que ello supone», nació este proyecto sin ánimo de lucro que pretende, además de promover la producción, distribución y comercialización de productos ecológicos, el estrechamiento de la relación productor-consumidor fomentando un comercio más justo, minimizar la huella ecológica de la agricultura fomentando procesos de producción y consumo a escala local y educar en estos conceptos a través de acciones formativas.
«Comprando en el supermercado», reflexiona la presidenta de La Reverde, «no nos damos cuenta de este esfuerzo y de la cantidad de dinero que se queda en los intermediarios, que provocan que el productor no gane y el consumidor pague mucho más. Es un concepto de comercio justo». Pero la labor de la Reverde no se queda en el mero intercambio. Aseguran que después de haber detectado en la gente «las ganas de volver al campo», también se plantearon como deseo y objetivo hacer que las personas se sientan «implicadas en el proyecto, no sólo como meros consumidores, aunque puedan comprar productos ecológicos», sino saber quién y dónde produce, con la posibilidad de colaborar, por ejemplo, en el proceso de recolección de determinados frutos, en determinadas ocasiones, y de convivir en eventos relacionados con lo agrícola y gastronómico.
Por otro lado, a pesar de reconocer que al principio les costó un poco, en la cooperativa compatibilizan perfectamente el consumo local y la sostenibilidad con las nuevas tecnologías. De hecho, «las personas que quieren comprar los productos acceden a un formulario on line que facilita todo el proceso de pedido tanto a los consumidores como a los productores». Eso sí, después de hecho el pedido por internet, «los productos se pueden recoger en el campo, en la propia finca de producción, o en las dos sedes de la entidad, en Jerez y El Puerto de Santa María, o incluso se los llevamos a algunos socios que están más lejos, por ejemplo en Lebrija».
El sistema de funcionamiento de esta cooperativa que cuenta con casi un centenar de socios es bastante sencillo. Mediante un cuota (que se devuelve con la baja), se accede a convertirse en socio de la entidad con la única obligación de realizar una compra anual de 125 euros. Los pedidos, que se realizan los martes a través de la web de la entidad, se reparten los jueves, es decir, semanalmente en cajas de dos tamaños, individual o familiar, de 5-6 ó de 8-10 kilos de peso de verduras y hortalizas de temporada.
Además, como servicio adicional y complementario, la cooperativa posibilita la compra conjunta de otros productos que siguen los mismos criterios de ecológico y local. Para más información: www.lareverde.org
