La organización agraria ASAJA ha asegurado en un comunicado que la convocatoria de huelga general «pincha en hueso en el campo andaluz», que según la organización » ha dado la espalda a una convocatoria que no iba con él», mientras que COAG, como anunció, ha cerrado hoy sus oficinas.
Desde ASAJA aseguran que «ese a la llamada a la huelga general por parte de UGT y CCOO, así como de otras organizaciones que dicen representar al sector agrario, lo cierto es que en todo el campo andaluz la jornada se está desarrollando con la normalidad propia del inicio de este nuevo ciclo de sequía».
En detalle, según la organización, «los agricultores de regadío siguen regando con normalidad e incrementando los costes de su explotación, los agricultores de secano dan el año por perdido y ya ni siquiera miran al cielo y los ganaderos continúan tirando de “cartera” para llevar, como cada día, el pienso y el forraje que necesitan sus animales a falta de pastos naturales.
Asaja reconoce la existencia tan sólo de un incidente puntual en la provincia de Cádiz, donde los tractoristas de una finca de la campiña, que tenían previsto sembrar hoy girasol antes de la llegada de las lluvias, previstas para mañana y pasado, y que no han podido salir a hacerlo por la acción de unos piquetes.
Por su parte, como anunció, COAG ha cerrado hoy sus oficinas, coincidiendo con la jornada de huelga general. Como aseguran en un comunicado, «la desregulación de los mercados, las importaciones sin control, la disminución del precio en origen de los productos agrarios, el abuso de poder de las industrias de la transformación y la distribución alimentaria, afecta laboralmente a los agricultores y ganaderos y se traduce en una imparable pérdida de rentas y empleos en el sector». Desde 2003, aseguran, el campo acumula una pérdida de renta del 31% y una reducción de 185.000 ocupados.
“COAG reclama un giro a favor del modelo social agrario de los agricultores y ganaderos profesionales y de la explotación familiar, que reconozca la importancia estratégica del mismo como base de la alimentación para toda la sociedad, y como generador de riqueza y empleo”, ha afirmado el Secretario General, Miguel Blanco. Asimismo, es imprescindible poner orden en el mercado de las materias primas y productos de alimentación; la actual especulación beneficia a unos pocos capitales y empobrece a los agricultores y a la sociedad en general, con especial incidencia en los trabajadores y trabajadoras.
